La Plaza Mayor de Astorga, como ya lo fuera en noviembre, volvió a concentrar este pasado domingo la reivindicación de toda la provincia de León por la reapertura del tren de la Ruta de la Plata. La protesta, que se celebró de forma simultánea en otras diez ciudades desde Gijón hasta Cádiz, reunió a representantes de todas las formaciones políticas, más que a ciudadanos de a pie, en una concentración en la que no faltaron los pendones y las banderas de León y en la que se volvió a exigir al Gobierno la inclusión del tramo ferroviario Astorga-Plasencia en la Red Básica Ampliada que el Ejecutivo plantea a la Unión Europea y su ejecución antes de 2040.
El portavoz de la Plataforma Corredor Oeste Ruta de la Plata, Eduardo Tocino, fue el encargado de dar lectura al manifiesto desde el balcón del Ayuntamiento en el que recordó que el estudio de viabilidad «no solo debe tener en cuenta el aspecto económico». «Es necesaria y urgente la recuperación de ese ferrocarril vertebrador, no pueden marginar al noroeste frente a otras zonas en las que sí se está invirtiendo el dinero, como Cataluña, mientras al oeste de España se nos pide 30 años de resignación y dos años para hacer otro estudio», apuntó Tocino que recordó al ministro Óscar Puente que «dijo que todo el trazado era vía verde y no es cierto porque entre Astorga y La Bañeza es visible, todavía hay carriles».
El alcalde de Astorga, José Luis Nieto, aseguró que le van a mandar una invitación a Puente «para que venga a ver esta zona y compruebe que el ferrocarril está aquí». Nieto también pidió al presidente de la Diputación, al que reprochó su ausencia, que «lidere esta reivindicación que es de toda la provincia». Por su parte, el alcalde de La Bañeza, Javier Carrera dijo que «no queremos competir con otras comunidades pero es lo justo para nuestra tierra».
También asistió el secretario general de la UPL, Luis Mariano Santos, quien comentó que la reapertura de este tramo es “fundamental para fortalecer ese eje logístico y clave para el futuro del territorio”. Por eso, dijo, la formación mantendrá “hasta el final” el apoyo a esa reivindicación.
El delegado de la Junta en León, Eduardo Diego, recalcó que la reapertura de ese trazado, cerrado a viajeros en 1985 y a mercancías en 1996, es «fundamental para la vertebración del oeste y de Castilla y León y no es momento de hacer estudios y esperar otros 30 o 40 años».