PIEDRA DE AFILAR – Enrique Ramos
Las diferentes variantes de peregrinación, así como sus propósitos, han dado en los últimos tiempos para una jerga de neologismos que tenemos ya más o menos interiorizada. Hay bicigrinos, turigrinos, e incluso he leído llamar hipogrinos a unos romeros que viajaron a Santiago a caballo.
Ahora nos hemos encontrado a un pirómano entre los romeros. Ojo, que no se ponga de moda y tengamos que añadir a la nomenclatura a los pirogrinos. La crónica negra del Camino sigue creciendo y Castrillo de los Polvazares tras el asesinato de Denisse Pikka, toma la cabeza con este incendio. Truman Capote hubiera bordado aquí algún relato.