La localidad asturiana se convierte durante dos días en el punto de encuentro para varias asociaciones del Camino de Santiago, en un evento que promete marcar un antes y un después en la concepción de los albergues de peregrinos. Astorga junto con representantes de Estella, Burgos, Logroño, la Fraternidad Internacional del Camino de Santiago y la Agrupación del Norte —esta última, anfitriona del encuentro—, se darán cita para sentar las bases de lo que serán los albergues del Siglo XXI.
Este encuentro, donde las asociaciones planean como ayudar al futuro del Camino de Santiago, forma parte del innovador proyecto «Experiencia Camino de Santiago Siglo XXI», financiado con fondos Next Generation EU a través del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo dentro del Plan estatal de Recuperación, Transformación y Resilencia. El objetivo principal es adaptar los albergues a la Agenda 2030 europea, enfocándose en la sostenibilidad, accesibilidad, y la integración de tecnologías que mejoren la experiencia del peregrino, respetando siempre el patrimonio cultural y natural del Camino.
La reunión en Tineo servirá como plataforma para intercambiar ideas, establecer criterios comunes y desarrollar un marco que guíe la transformación de los albergues, asegurando que estos espacios no solo cumplan con las necesidades actuales de los peregrinos sino que también se anticipen a los desafíos del futuro. Los temas a discutir incluyen la implementación de prácticas ecológicas, la mejora de la conectividad y la digitalización de servicios, sin perder de vista la esencia de acogida y comunidad que caracteriza al Camino de Santiago. Aunque como subraya el presidente de la asociación astorgana, Juan Carlos Pérez Cabezas, el Camino es de por si una experiencia muy ecológica. “No hay nada más ecológico que no usar medios de transporte y realizar un viaje con tan solo las pertenencias de tu mochila y tus fuerzas atravesando respetuosamente el medio rural. Pero es verdad que los edificios admiten mejoras y la Unión Europea está promoviendo unos cambios que en unos años serán obligatorios. De ahí que estemos tratando de adelantarnos con este proyecto en el que Astorga es uno de los sietes socios responsables».
La colaboración entre las distintas asociaciones es un reflejo del espíritu de unidad y cooperación que el Camino ha inspirado a lo largo de los siglos. Estas seis asociaciones están apoyadas por la totalidad de las asociaciones del Camino Francés y la Agrupación de las Asociaciones de los caminos del Norte.
La expectativa es que estas nuevas bases que surjan del proyecto CSXXI sirvan de inspiración para otros el resto de itinerarios a Santiago, promoviendo una transformación positiva y duradera en la forma en que peregrinos de todo el mundo experimentan esta milenaria ruta.