La menor necesidad de agua para los cultivos gracias a una pluviosidad veraniega intermitente, ha propiciado que el año hidrológico, que comienza este martes, se encuentre a los embalses de la cuenca del Duero en una situación históricamente positiva ya que desde 2018 no había un registro de tantas reservas de agua (casi el 50%) a estas alturas.
En la comarca, los dos embalses que riegan el campo del área de Astorga y La Bañeza, no llegan a esas reservas pero igualmente ofrecen un perfil poco conocido para estas fechas: Villameca está en el 26% y Barrios de Luna en el 33%.
Un despacho servido este lunes por la Confederación Hidrográfica del Duero refiere esta situación positiva del aforo de los embalses, y datos respecto de los dos acopios de agua de la comarca: tanto en Barrios como en Villameca se han terminado los trabajos de topografía y batimetría y con ellos se ha depurado la capacidad de estos embalses. Barrios de Luna tiene, en realidad, dos hectómetros más de capacidad de los que se ha venido estimando hasta ahora: 310 hectómetros frente a los 308 que se creía; pero Villameca, ve reducir su capacidad en casi un hectómetro: frente a los 19.9 hectómetros cúbicos en que se fijaba su capacidad, tras los últimos trabajos, un aforo de 18,68.
Ese hectómetro largo de reducción de la capacidad de almacenamiento, supone un 6% menos de lo que se había venido manejando.
Asimismo se ha corregido, en este caso también al alza, el aforo máximo del embalse de Selga de Ordás, asociado a Barrios de Luna, que puede acoger un máximo de 3,05 hectómetros cúbicos frente a los 2,5 cubicados hasta ahora.