Luis Herrero
Un año más, y ya van XIV ediciones de las que se tengan registros y documentos gráficos, los guajes nacidos entre la década de los 50 y 1975 volvieron a hincar sus rodillas sobre arena del jardín de su infancia y demostrar que sus habilidades en el «antiguo» arte de las chapas se mantienen intactas.
Comenzó la jornada con el reparto de dorsales, mientras Gorgorito resolvía enigmas y se deshacía con astucia de la bruja Ciriaca. Tras ello se celebró una comida de confraternización a la que acudieron gran parte de los participantes de la disputa que sucedería horas después.
Sobre un bonito y atractivo circuito, diseño de Toñín, y ejecutado y modificado (sin consulta) por el ingeniero Rogelio; el concejal de Cultura, Tomás Valle, dio inicio a la carrera con la salida neutralizada.
El grupo fue compacto hasta la llegada a las primeras cumbres, donde empezó a sacar ventaja Miguel Ángel Miñambres #31, del equipo del barrio de San Andrés. La cordillera se hizo muy cuesta arriba a gran parte del pelotón, formando una gran distancia entre el escapado y el resto.
Intentando solventar y volver a unificar la carrera entran en acción los mecánicos, que debido a un sabotaje en el asfalto, las «monturas» quedaron inhabilitadas por «pinchazo general».
Un gran grupo de corredores logran aliarse y se acercan al líder, que pasa por el PC1, el «G.P. de la Montaña», y logrando el maillot verde de la prueba. En este primer punto quedan eliminados 5 últimos corredores que en esos momentos cerraban la carrera por «colisión.
Se pasa por el avituallamiento, donde los «atletas» reponen fuerzas tras el gran esfuerzo. Patrocinio este año de Vinos Carro.
El PC2, la «Meta Volante», vuelve a superarlo en primer lugar el #31, y al paso de los primeros 20 corredores, se eliminan a los 5 últimos rezagados.
Ni la niebla, ni el túnel, ni las trampas o peligros pusieron nervioso a Miñambres que cada vez sacaba más ventaja a pelotón. Se llama a los mecánicos para intentar corregir errores e intentar pillar o acercarse al destacado líder de la carrera. Pero por más que se intentó, nada se pudo hacer, llegando a la Meta con casi 30 minutos de ventaja sobre el segundo.
Las clasificaciones y premios de este año fueron los siguientes: primer clasificado, Miguel Ángel Miñambres (equipo San Andrés); segundo clasificado Óscar Carballo (equipo Veraneantes) y Venancio García en tercera posición (Veraneantes). Miñambres se llevó además el título de Rey de la Montaña mientras que el Farolillo Rojo fue Ángel Álvarez «Chico» del equipo de Santa Marta. Los Veraneantes se llevaron el premio de campeones por equipos.
El galardón de Reina de los Juegos Pa’ Guajes de este año recayó en Ana, que fue la encargada de entregar los premios. Destacar los premios Vintage de este año, que se llevaron Miguel Ángel Miñambres, como campeón; Rafael Fernández, como participante de más edad y Kilyam Carrasco, de tres años, premio al mejor mecánico, del equipo de Rectivía.
Los lotes de productos típicos de la zona, donados por Astorga Digital, a los clasificados en los puestos 26, 21 y 16, del grupo de eliminados en los 3 Puntos de Control fueron para: José Luis Callejo; Rafael Fernández y Luis Herrero.
Y con la foto de grupo acabó una nueva jornada de amistad, recuerdos, risas y rodillas doloridas, que estamos deseando repetir la edición número 15 el próximo año.