El Sindicato Central del Embalse de Los Barrios de Luna convocado a las Comunidades de Regantes en él integradas para informarles de que el Gobierno de España a través del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico no va a cumplir su compromiso de construir las balsas laterales de La Rial y Los Morales, alternativa elegida para el necesario incremento de la regulación del Sistema Órbigo, a pesar de estar incluidas en el Plan Hidrológico de la Demarcación con consignación presupuestaria y estar redactándose el proyecto de construcción.
Si tenemos en cuenta la estadística de reducción de aportaciones que viene sufriendo históricamente la cuenca receptora del Embalse de Los Barrios de Luna y que debido a los efectos del cambio climático dicha tendencia va a continuar en el futuro, de no llevarse a cabo el aumento de la regulación de dicho Sistema puede llegar a provocar unas pérdidas millonarias para toda la zona regable dependiente del embalse de Barrios de Luna.
El pasado 21 de enero de 2025 representantes de FERDUERO, entre los que nos encontrábamos los del Sindicato Central de Barrios de Luna, mantuvimos una reunión con la Directora General del Agua en la sede de la Confederación Hidrográfica del Duero en Valladolid y uno de los puntos a tratar era “el estado de redacción del proyecto de construcción de las balsas laterales de La Rial y Los Morales”. La Directora General nos informó que podemos dar por muerta la DIA que sustenta dichas obras a partir del momento en que el Tribunal Supremo resuelva el contencioso planteado contra el Plan Hidrológico de la Demarcación por la inclusión de dichas obras en el programa de medidas del citado plan y todo apunta a que se va a resolver en contra de la Entidad demandante. Esto es absurdo y paradójico a todas luces ya que, si la sentencia es favorable al Gobierno, la ejecución de ambas infraestructuras se mantendrá en el Plan Hidrológico de la Demarcación, pero no será posible su construcción por la caducidad de la DIA. Un auténtico despropósito. Si finalmente se consuma la referida caducidad, habría que empezar todos los trámites de nuevo y sin tener la certeza de contar con que se apruebe de nuevo una Declaración favorable.
Los regantes nos sentimos engañados por enésima vez y denunciamos la inacción del Gobierno de España y su falta de valentía, ya que fundamentan su actuación en la oposición vecinal a que se ejecuten dichas obras que, según ellos, es lo que les ha hecho recular. Para nosotros esto es solo una excusa y un mensaje peligroso de cara al futuro. La realidad, es que han demostrado desde un principio que no las querían hacer y pretenden utilizar como coartada al movimiento opositor. Conocían sobradamente que a partir de la aprobación de la DIA contaban con un plazo máximo de 6 años para iniciar las obras, pero han estado enredando con estudios de todo tipo y gastando alegremente dinero público con el único fin de que pase el tiempo, lo que nos parece vergonzoso.
El Ministerio de la época y la Confederación Hidrográfica del Duero son los responsables de la situación actual al ampliar la zona regable de forma unilateral y por imposición, fruto de la decisión de incorporar a la misma 6.000 nuevas hectáreas, “por lo que es obligación del Gobierno proporcionar una solución que sea técnica y económicamente viable para los usuarios afectados”. Al resto de afectados por la decisión de no construir los embalses de Omaña y Vidrieros se les ofrecieron alternativas, pero en nuestro caso la única opción que nos quedó fue y sigue siendo “buscarnos la vida”.
Para los representantes del Sindicato Central del Embalse de Los Barrios de Luna, el incremento de regulación del Sistema Órbigo es un objetivo irrenunciable, puesto que “no parece muy coherente pedir a las Comunidades de Regantes que hagan un esfuerzo económico y una auténtica revolución para la modernización de sus infraestructuras de riego y, por el contrario, no asegurarles la necesaria garantía del recurso del agua”.
También tenemos que tener en cuenta que no solo se ha ampliado la zona regable dependiente del embalse de Barrios de Luna de las 45.000 has proyectadas inicialmente con su construcción hasta las 53.000 actuales, sino que igualmente se han ido incrementando progresivamente los caudales ecológicos y han incorporado nuevos abastecimientos (en ambos casos con preferencia sobre el regadío de acuerdo al orden de prelación establecido en la ley), lo que trae como consecuencia que la misma tarta se tenga que repartir entre muchos más comensales y las consecuencias las sufriremos los usuarios regantes en el momento en que encadenemos dos campañas seguidas en situación de sequía.
En definitiva, los regantes denunciamos el engaño sufrido por el Gobierno de España, desde el propio Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, pasando por la Secretaría de Estado de Medio Ambiente, la Dirección General del Agua y la Confederación Hidrográfica del Duero, que han estado mareando la perdiz durante 6 años para dejar caducar deliberadamente la DIA y su prórroga y que el problema generado se siga perpetuando en el tiempo. Y no solo eso, sino que también exigimos soluciones viables.
En la reunión informativa mantenida el pasado viernes, los representantes de las Comunidades de regantes han solicitado la convocatoria de una Asamblea General Extraordinaria del Sindicato Central con el fin de plantear las acciones a emprender, porque no nos vamos a quedar cruzados ante la pasividad del Gobierno de España que no adopta ninguna medida para solucionar nuestros problemas, lo que puede poner en riesgo en un futuro la economía de los agricultores a los que representamos.