La revisión del padrón continuo publicado este miércoles por el INE con un nivel de desagregación hasta provincial, muestra cómo la provincia de León sigue siendo una de las pocas que pierde población en España. Es, además, la tercera que más ha visto mermar sus padrones en el último año, en alrededor de 1.500 habitantes para caer hasta un total de 446.326 residentes; solo Córdoba y Jaén tienen peores datos en términos absolutos (más de 3.600 habitantes menos la primera y casi 1.600 la segunda).
En términos relativos también León es la tercera con peor comportamiento, ya que desde julio de 2023 ha perdido el 0,34% de su población frente a Zamora, que perdió el 0,49%, y Córdoba que perdió el 0,47%.
En términos intertrimestrales, Castilla y León es una de las tres comunidades autónomas que más ha perdido población respecto al primer trimestre del año en la medición a 1 de julio, bajando a 2.390.321 residentes al perder más de 600 empadronados. Las otras dos han sido Andalucía y Extremadura. Todas las demás, poco o mucho, han ganado población.
Se da la circunstancia de que, en Castilla y León, el balance negativo lo aportan León, Zamora, Ávila y Salamanca, ya que en las otras cinco provincias creció el número de habitantes, aunque no fue suficiente para compensar las mermas de estas cuatro.
A nivel nacional, España ganó más de 60.000 nuevos empadronados y bate un récord histórico de población con 48.797.875 habitantes.