El equipo de Gobierno municipal sacó adelante en el pleno la revisión de la tasa de vertido y tratamiento de basuras que costará a cada domicilio astorgano un 40% más que este año tras la disolución del consorcio Gersul. Un domicilio pasará a pagar de 38 a 53 euros en una maniobra de fiscalidad municipal que el equipo de Gobierno quiso justificar en normas nacionales y europeas, pero que ningún otro municipio de la provincia, salvo Valencia de don Juan, va a aplicar.
La oposición criticó en el pleno esta exacción y el portavoz socialista Juan José Alonso Perandones llegó a tildar la de inmoral por repercutir a los ciudadanos este coste mientras las retribuciones dictadas por el equipo de gobierno crecían en medio millón de euros anuales.
Aún más, desde las bancadas de la oposición, tanto PSOE como IU, criticaron que se hubiera facilitado la documentación del pleno tres cuartos de hora antes de su celebración y no se hubiera convocado comisión informativa.
El alcalde Nieto arguyó un fallo de los funcionarios.