PIEDRA DE AFILAR – Enrique Ramos
Parafraseando al brasileño barón de Itararé, cuando dijo que «si hay un imbécil en el poder, es porque quienes lo eligieron están bien representados», podríamos cambiar imbécil por prevaricador y trasladarlo al mundo del fútbol.
Los dirigentes balompédicos españoles han elegido a un tipo condenado (aún no en firme) por prevaricación para la que los presida. Como decían los mafiosos italonorteamericanos: Uno de los nuestros.